Estoy sentado en el parque. Tú estás allí, erguida junto a la valla que cerca el espacio donde juegan los niños. Te siento como una extensión de mi alma, perdida en las estrellas que abarcan el espacio donde jugamos "los niños".
Mientras doblas tu cuerpo, para escuchar infantiles palabras me sorprenden los sentimientos que a ti me atan...
Te respiro; huelo contigo, veo a través de tus ojos... ...miras através de mí. Si el pelo ondula tu cabello se mueven mis cimientos veo el cordón que nos une... ... y el espacio ocupa mi lugar.
Como si sonaran alertas en tus sentidos giras inquieta la cabeza y al verme allí perdido, sonríes, pues sabes que así... vuelvo a recuperar mi conciencia.
(Mientras respiro; lento, y tu, en la corta distancia, inhalas conmigo... ... y vuelvo a sonreir, allí donde juegan los niños)